La atención es un poco lenta ya que el lugar es muy grande y casi siempre se encuentra lleno. Los desayunos son muy deliciosos, comida casera. Probé los pays (de manzana y de queso) y no tienen nada de especial 7/10. Siempre regreso ya que el sabor es bueno y el pan de banano siempre huele delicioso desde afuera.