Ya sea sentándote en las mesas del jardín o dentro de la casa, el ambiente es espectacular, para una cita casual o romántica, con amigos o familia. Cada platillo tiene un toque de distinción en textura, sabor o aroma. El arroz del sushi en su punto justo, quizás sólo un poco más insípido de lo habitual, los ingredientes frescos y a la temperatura adecuada. El personal muy profesional y atento. Realmente toda una experiencia que repetiría sin duda!