Primera vez que voy a desayunar a este lugar, y definitivamente la ultima. Independientemente de que a la comida le falta sabor y que el café es muy ralo me molesto el hecho de que elegí tostadas a la francesa por que en la carta indican que “son rellenas”, las mías no traían nada adentro. Se tardaron más de media hora en explicarme porque lo que anuncian es distinto a lo que sirven, y obviamente la explicación no fue de mi agrado