El restaurante es una experiencia totalmente diferente a lo tradicional, la comida en la barra muy común de la comida asiática pero que en Guatemala es poco común, estar cerca de la cocina y de los cocineros es interesante. Lo malo es que al ser un lugar pequeño si se llega en hora de almuerzo o en la noche se tiene que hacer cola para poder entrar, lo que puede ser un poco tedioso. Pero al entrar y leer el menú nos damos cuenta que tienen mucha variedad de Ramen a comparación de otros restaurantes en Guatemala que manejan dos o tres tipos de ramen a lo mucho, es muy delicioso y es perfecto para una cita y conocer un lugar totalmente diferente, sus postres también son muy ricos, sin duda el mejor ramen de Guatemala