Hace muchos años que no iba, siempre fue de mis lugares favoritos y ayer lo visité después de unos 7 años y sigue siendo espectacular!! Lo que más me gusta es el ambiente, la terraza que tienen y el servicio que te dan. Es un plan demasiado romántico y “clandestino” por lo que encuentras gente de otro nivel. La comida es sabrosa (siendo objetiva, puede llegar a igualarse a otros lugares que quizás sean un poco mas económicos, pero bueno el ambiente es lo que lo hace ser un plan distinto), la carta no es muy extensa pero creo que las cosas que tienen son divinas. Volvería muchas veces más! Sigue siendo de mis favoritos!

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