Excelente comida china. Mantiene la misma calidad de hace años. Bastante costosa, pero digamos que las porciones son “justas” con el precio. No es que son pequeñas, pero no corresponden al precio del todo. Pedimos arroz cantonés, pollo agridulce y pollo con miel y ajonjolí. Ahhh y también lumpias, que estaban mundiales. Perfecto para reunión con amigos o grupos para pedir más variedad de platos, aunque para parejas es buena opción igual.