En un restaurante muy bien ubicado, el fondue de queso esta bien, no es el mejor pero puede matar un antojo. El servicio regular, un ambiente poco relajado. Lo crítico del restaurante es la limpieza. Entendería, por lo q significa la inversión, que mantengan los mismos muebles y utensilios de hace 20 años, pero es necesario limpiar a profundidad y cambiar manteles y platos rotos, se siente mal olor y es bastante desagradable.