Durante mi visita pude probar lo siguiente: las costillas st. Louis, las cuales estaban muy buenas (suaves, mucha sazón y el característico sabor del ahumado); el brisket burnt, carne ahumada y picante (sabor muy fuerte, en lo personal mucho para mi gusto); la hamburguesa de carne con queso (muy buena, bien preparada, con carne de primera y verdadero queso). Las papas con queso y tocineta (lo bueno es la porción del verdadero queso fundido, cosa que ya había olvidado). El ambiente es original, amplio y agradable. La atención es muy amable y atenta. Lo recomiendo para probar o pasar una experiencia diferente.

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