Dulces buenos, Comida buena, nada de otro mundo. La atención pésima, pareciera que para trabajar ahí se tiene como requisito principal ser antipático y grosero. Siento que esta lleno es porque es la única opción de su tipo en Prados. Lo bueno de la comida, se pierde con la mala atención. Cada trabajador es mas grosero que el otro. Lastima que tengan tan mala atención cuando tienen una muy buena ubicación y comida