En términos generales es más de lo que esperaba. Si bien queda en una zona muy transcurrida y con mucho ruido, logran hacer del restaurante uno que no pareciera quedar en la av Francisco Miranda. El lugar no es nada elegante o especial, pero sí cómodo y agradable. Tenía bajas expectativas por ser un sushi "barato", pero la verdad es que cuidan mucho los ingredientes y las porciones. Nosotros cenamos 2 personas con un combo (15 roles) y uno individual (10 roles) y quedamos bastante bien. Se siente el cangrejo, el salmón y los camarones. No tienen intención de darte un roll de puro arroz, ni un topping con sabor a mayonesa. Recomendado!

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