Soy muy exigente con la comida portuguesa, ya que soy descendiente de esta cultura. Cuando visitó Grille, siento que quien me cocina es mi abuela Beatris y quien me sirve es mi padre. El milho frito me traslada a Madeira y de la variedad de bacalaos presentes en la carta, mi favorito es a la vizcaína. Siempre de entrada pido el bolo do caco y sabe tal cual al de las festas de Saõ Vicente. Los vinos todos recomendados.