Excelente. Una de las opciones más exquisitas en el centro de Caracas. El menú es una sorpresa pues no hay carta fija, varían diariamente la oferta, dependiendo la hora a veces se agotan ciertos platos, abren desde la mañana sirviendo desayunos sencillos. La calidad de la comida (almuerzo), nivel gourmet, es insuperable. La armonía de los sabores en los platos es perfecta, muy equilibrada. La presentación, sobre todo los postres, es hermosa. En cuanto a costos, vale lo que es, no es una típica opción económica del centro. La atención muy buena, amables y pacientes, lo único es que puede demorarse un poco la comida, pero no se hace tan pesada la espera pues el ambiente es muy grato, al aire libre tipo campestre, se encuentra dentro de la casa museo de los mendoza, por lo que es bastante seguro aunque no cuentan con estacionamiento. Este sitio es una de las mejores alternativas actualmente en Caracas, no hay arrepentimientos.

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