Buen café, bien presentado, ambiente agradable. El Bombón Amelie viene en una bonita y pequeña presentación y es algo empalagoso. En cuanto a tortas; buenas porciones para compartir. Fui por segunda vez por la tan referenciada Cheesecake con Brownie, la pedí y no logró, brownie seco y una porción pequeña. Volvería por un café, sabiendo que el rollo de este local es lo reducido de su espacio y su demanda, así que no es posible tomarse el café con calma y sobremesa porque al cabo de un rato el personal te pide que desalojes la mesa.