No le doy la quinta estrella en ambiente Y servicio por el televisor que tenían prendido a las 8:00 pm con comensales en las mesas y viendo un juego de béisbol en un restaurante de comida vasca. El resto excelente como siempre, con los fogones capitaneados por el che Jose Diaz, garantía de platos de otro nivel. Difícil equivocarse con esta elección.