Los almuerzos son muy buenos, los cachitos, el pan y los dulces también y sobre todo EL PAN DE JAMÓN en diciembre. El problema es la ubicación, yo crecí yendo a esta panadería y fui testigo del deterioro de la zona, actualmente hay 2 o 3 mendigos siempre afuera que se molestan cuando no les dan dinero, y cada vez son más agresivos. Por esto ya no voy a la panadería, y conozco algunos amigos que hacen lo mismo, más adelante hay otra panadería que no tiene piedreros afuera y aunque no es tan buena, no hay incomodidad.