Antes que todo debo señalar que tiene una excelente vista al mar y al Waraira Repano, con el Picacho de Galipán a un lado donde se ve espectacular. Buena comida con buena presentación, un poco tibia para mi gusto, las porciones son bien resumidas, el ambiente en la terraza es excelente para compartir, super agradable; recomiendo el tartar de atún con queso de cabra y la brusqueta con tomates cherry y queso cabra. El risotto de tomates secos es algo cargado y un poco salado, no lo recomiendo.