Vale la pena soportar el mal servicio y talante de las empleadas para comerse unos exquisitos dulces profiteroles, unos chocolates o cualquier otra cosa elaborada en su cocina. Fabulosa pastelería de primera
Vale la pena soportar el mal servicio y talante de las empleadas para comerse unos exquisitos dulces profiteroles, unos chocolates o cualquier otra cosa elaborada en su cocina. Fabulosa pastelería de primera
Actualiza tu navegador para ver esta página correctamente. Actualizar mi navegador ahora