Esta muy bien ubicado en una esquina de Los Palos Grandes, el sitio es pequeño y no tan acogedor, es bonita la decoracion de los murales. La terraza está agradable, pero la gente fuma y en el día hace mucho calor y ruido, en la noche está mejor. Tienen bastante buena atención, hasta el personal de limpieza atento te da la bienvenida. Es una carta larguísima exageradamente larga, te pierdes con tanta opción. El sushi está normal, algunos de mejor sabor y otros más simples, son de buen tamaño y muy correcto el arroz, ninguno de los tres que probamos fue inolvidable o me merece recordar y reseñar. El tempurizado no es el mejor que haya probado, podría ser más crujiente. Pedí un wok de tallarines, específicamente de arroz, así me los confirmaron y llegaron de trigo y la persona insistió que eran de arroz. Aún los fallos, estimo se le puede dar otra oportunidad, elegir otros rolls a ver qué pasa.