Un restaurante de corte Italiano. Muy bien trabajado y elaborado todo su menú con cuidado. Manejan un menú corto y conciso. Hoy tuve la oportunidad de probar los capelletti de remolacha y quedé sin palabras por su sabor tan exquisito. Vienen rellenos de queso y aunque son pocos, el acompañamiento exalta el sabor y aumenta la sensibilidad a los sabores. Y las almendras le dan un sabor contraste muy bueno. También pude probar el Schnitzel que básicamente es una carne apanada y me gustó mucho porque es bondadosa, un buen sabor y no se siente tanto el aceite. Los acompañamientos de este plato me gustó mucho que hace un buen contraste con la carne. La ensalada y el puré de papá estaba delicioso y trae una buena salsa de champiñones. En general este restaurante es un 10 en todo. Felicitaciones al chef. El lugar lindo y agradable. Los precios cómodos.

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