Fui a desayunar en mi visita a la ciudad de Cali. Fui al punto de San Antonio. Pedí una arepa de chontaduro. Venía con unos huevos y queso. Acompañada de un chocolate casero. Me gustó bastante la comida y el servicio fue atento por parte del personal. Quedó pendiente otra visita para probar las tortas ya que me las recomendaron mucho también. Solo que ese desayuno estuvo bastante saciante. El ambiente es tranquilo también para reunirse y charlar.