Fuimos un grupo de 17 personas y eramos los unicos comsales un viernes a la 1 de la tarde. Los mejores platos fueron la posta y las cazuelas de mar. Pero no se le vaya ocurrir pedir pescado porque no vale la pena, porque las porciones son pequeñas y secas. Las entradas como aborrjados y chicharrones bien, pero los postres un desastre, solo se salvan las brevas con arequipe.