El restaurante fue renovado totalmente. Al entrar nos dimos cuenta que ya no pertenece a los mismos dueños. Trataron de darle una imagen mas contemporanea pero me parece que perdio su encanto original. Adicionalmente incrementaron todos los precios sustancialmente. Dejo de ser una trattoria clasica estilo familiar para pasar a algo mas sofisticado lo cual lo hace un restaurante totalmente diferente. La comida aceptable, para esos lugares en los cuales va uno a la fija a lo q espera uno recibir de comida italiana.