El ambiente del restaurante es muy agradable. La música viva molesta un poco por el alto sonido. Pero las canciones y la calidad de la voz de la cantante es cheveri. Los platos mariscos son muy riquísimos (calamares como entrada y paella como plato fuerte). En cuanto a carne - el fillete de res fue un poco durito. El servicio para un restaurante tal costoso podría ser mejor. Nuestro camarero en vez de tostadas con salmón nos trajo unos con jamón. Y muuuuuuuy lento el servicio. Esperamos nuestras copas de sangria demasiado mucho (20 minutos). Pero en total si quiere pasar una tarde en un restaurante europeo aconsejo!