Lo mejor del lugar es la música y el ambiente. El servicio no es el más sobresaliente, aunque el sabor de la comida es bueno. Los platos son generosos. El ambiente está inspirado en irlanda, hay más de 100 tipos de cerveza y la música es la joya de la corona del lugar: rock suave! clásicos 100% Volvería pero más que a comer, a tomar cerveza y escuchar música.