Es un restaurante de comida internacional. Tiene acentos de francia, Italia, colombia y un poco de mediterráneo. Hoy tuve la oportunidad de probar el nuevo crepe sombrero vueltiado y es todo un exito. Combina excelentemente el sabor del plátano con sour cream y aguacate para evocar sabores e ingredientes de la cocina colombiana. El precio está muy razonable y la porción es la adecuada. Probe igualmente el vino de verano que es una combinación de sprite con vino tinto y esta bien logrado. Yo sugiero menos hielo para la combinación. El restaurante es un clásico colombiano. El lugar es lindo y bien decorado aunque un poco ruidoso. La atención estuvo bien aunque siempre permanece lleno.

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