Es un restaurante español con énfasis en tapas. Me gustó mucho que en pocos lugares se encuentra jamón de bellota lo cual lo hace aún más especial. El menú bien español y con grandes aciertos en lo que ofrecen. Los ingredientes son de muy buena calidad y la preparación de los mismos están bien trabajados. Me gustó muchísimo el surtido ibérico de bellota que lástima que sea tan pequeña la porción. El cochinillo también muy bien trabajado pero para ese precio la cantidad es minúscula. Las patatas a lo pobre muy ricas y abundantes. Las bebidas son excelentes y venden una de las sangrías rose mejor realizadas que he podido probar. La atención es buena aunque uno de los meseros no tienen ni idea de lo que ofrece en el menú. El lugar es muy pequeño y poco atractivo. Aunque quieren vender algo exclusivo y pequeño podría mejorar el lugar.