Tuve la peor experiencia de mi vida en este restaurante. La primera y única vez que fui nos dieron un cono de ceviche en mal estado. Pusimos la queja al mesero quien amablemente lo devolvió a la cocina y uno de los cocineros no acepto y de mala gana nos mando a decir que entonces nos daba otro, cuando el olor y el sabor del cono era terrible. El mesero noto nuestro desconcierto y aceptó el mal estado de la comida, pero no hizo nada más. Decidimos irnos y nunca más volver ya que esa ocasión ameritaba otra reacción de parte del restaurante.