Hace un par de años cuando comenzaba era de lo mejor en pescados de Bogotá, pero pasaron los meses y decidieron ponerse tacaños, las porciones yo diría que las redujeron casi a la mitad, tanto así que la última visita reclamé y el mesero osó decirme que siempre había sido así, cuando meses atrás era todo los contrario, los ceviches llegaban en un tazón impresionante que para una sola persona eran toda la cena. Lástima porque redujeron tanto las porciones que alcanza uno a sentirse estafado. Lo que si no redujeron es la calidad, el sabor, la frescura, el sazón. Los ceviches siguen siendo de lo mejor de la ciudad y el famoso "pescado en la bolsa" se convierte en un clásico. Lástima lo exagerado de los precios que arruina la relación precio/calidad.