Espectacular el sitio, la terraza, la decoración, muy italina y muy romántico. siempre dan ganas de regresar. Aunque la comida no es de gourmets, la calidad promedio es bastante aceptable y sobre todo, ofrece platos y preparaciones que no tienen otros restaurantes italianos de mas renombre. Buena relación precio- calidad, lo cual es muy escaso en restaurantes de Bogotá !