Para los precios que maneja tiene más bajos que altos. Entre las cosas positivas resalta el ambiente del lugar, es espacioso, con Dj en vivo, a veces presentaciones de jazz y bailarín de tap, la decoración es linda y en general es muy agradable. El servicio es amable y atento aunque insuficiente para la cantidad de clientes. A pesar de que teníamos reserva, nos acomodaron en la barra y aunque había mesas disponibles, jamás nos asignaron una porque son para grupos así que si vas en pareja es incómodo. La comida es buena, tiene propuestas interesantes, manejan algunos ingredientes locales que contrastan muy bien con sus combinaciones pero las porciones son algo pequeñas para los precios.

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