El restaurante de llano es una linda locación. La comida es rica pero, a criterio nuestro, no para 5 estrellas, sino 4. De hecho, la limonada de coco, sabía rico, pero me la dieron con un iceberg de hielo, no granizada, luego pedí licuarla otro poco y ya era muy líquida y no estaba fría. Nos gustó la propuesta de tener música en vivo, ay, pero qué lástima porque todos muy desafinados; qué difícil escucharlos cantar. En cambio la chica con el saxofón: top.