El lugar es muy bonito, tiene una vista privilegiada del Puerto en Colón 2000. El ambiente es lindo, la musica acompaña y te transporta. La atención es esmerada, aunque nunca llego el Coctel de Camarones que pedimos. El pescado frito a lo macho DELICIOSO y los langostinos también. Vale la pena volver para probar otras opciones.