100% Panameño, con comida rica, que sabe a casa y a los mejores precios. Ofrecen todo lo que me gusta, desde desayunos y almuerzoa típicos, hasta bocadillos para comer y llevar: huevitos de leche, suspiros, cocaditas, duros y cositas ricas. En fin de semana hay música típica en vivo. El sitio es muy panameño y acogedor. Me encanta pasar a comer aquí! A veces la fila para comprar es larga, pero vale mucho la pena.