Descubrí este lugar la última vez que fui a Santiago y LO AMÉ. Desde la excelente atención del chico que nos atendió y ni hablemos de su rica comida. Pedimos dos entradas, las wings que venieron bañadas con una salsa riquísima hecha por ellos y los siu mais fritos que estaban deliciosooosss. Me encantó la variedad de opciones que tienen y todo se ve riquísimo. De plato fuerte probamos la lasagna de berenjenas que me pareció muy muy rica, recomendada. El file de pollo con hongos con una super buena porción y muy rico y jugoso. Y el toma hawk estaba riquísimo y un super corto con buena porción que puede alcanzar hasta para 3 personas. Amé las opciones de acompañantes que tienen con opciones healthy y frescas. Me quedé con ganas de probar los postres, definitivo que se convirtió en mi lugar favorito en Santiago. 100% recomendado