Para empezar que el hotel es un paraíso. Difrutar de la comida con una vista al mar espectacular es maravilloso. La chef cocina espectacular. Deben probar el salmón al limón y las almejas al vino. El desayuno estaba incluido pero para el domingo, después de haber cenado delicioso, decidimos pedir de la carta y no nos defraudó, recomendado el bistec picado con tortilla.