Como era de esperarse, fuimos a almorzar en este restaurante. Nos gusta mucho la comida de este lugar. Esta vez queríamos probar otros platos. Pedimos los Caracoles Gratinados con Mantequilla de Ajo, que es nuestra entrada favorita. Pedimos dos nuevas entradas: 1) Berenjenas Apanadas Fritas en Salsa Pomodoro y 2) Almejas a la Marinera Servidas con Pan Tibio. Ambos deliciosos. Cada una pidió su plato fuerte. Yo opté por el Confit de Pato en Salsa de Arándanos con Linguini y lo encontré exquisito. Todas, sin excepción, estuvimos contentas con nuestro respectivo plato. Pedimos dos postres para compartir…¡muy ricos por cierto! Lo que más nos gusta es que el mismo Chef Pascal se acerca a nuestra mesa para saludarnos. Conversa breve con nosotras. También vino a despedirse de nosotras. Le dimos las gracias y le dijimos lo suculenta que estaba cada plato. La atención y el servicio excelente. Lo recomiendo 100%.

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