Restaurante con bonita vista a la playa. Las raciones de comida son pequeñas, preparan los licuados luego de traer lo que ordenaste y la atención es pésima. Esperamos 10 min en la mesa y tuve que levantarme a pedir la carta. Ni siquiera para brindarnos agua y no.. no estaba lleno el lugar. no lo recomiendo y no creo regresar.