Fuimos en familia a comer en ese restaurante con esa situación tan difícil. Hampurguesa cómo siempre buena, pocas marcas de cervezas. Coste desproporcionado para no comer más en platos en cerámica y en vaso de vidrio y acuerdo la magia del camerero cuando te servía el queso fundido... todo intercambiado con una cajita de cartón como en MC o BK y vaso de plastica y ya . No regresaré hasta cuando no bajaran lis precios de un 30%.