Tenia quizás años que no pasaba por este restaurante de verdadera cocina italiana, tradicional en Panamá, el ambiente y decoracion no ha sido renovado pero tampoco me sentí mal, si hay que arreglar las sillas, lo que ordene una Minestrone y un pesacado al horno con spaguetti al Pomodoro de magnifico sabor, puntos de sal y pimienta precisos a mi gusto y buena presentacion. Fuimos atendidos por un mesero bien entrenado, cordial, educado y atento, escuela de nuestro amigo Carmine.