A todo el que pasa le llama la atención este estilo de restaurant nuevo en Panamá. Por eso siempre está lleno desde que lo abrieron a principios de marzo. Ambiente norteamericano de Diner: comida rápida, batidos y papas fritas. Tienen menú de niños y es muy bonito el vestuario de las camareras en rosa y negro. Creo que en su diseño todo va con el concepto. Además, super limpio y reluciente. Lo único que vi deteriorado son los menús que te entregan, creo que ya hay que sustituirlos por su desgaste. La comida es normal, nada especial que señalar, ni siquiera los batidos, de los cuales habíamos ya escuchado opiniones favorables. Los precios son altos para la calidad de la comida. Lo que recomendaría son las garlic fries y el waffle de nutella con helado. El Club Sándwich lo sirven con huevo y es inmenso. El servicio es regular, las camareras atentas pero tanto público hace que la atención a veces no sea tan rápida como debiera, en nuestra visita la demora fue a la hora de pagar, pero no solamente nos pasó a nosotros, varias mesas estaban impacientes por la demora en el cobro. En general el público se va satisfecho, señal de que ha gustado el concepto.

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