Probé Wasabi porque me lo recomendaban un montón y no me decepcionó. Definitivamente sobrepasó mis expectativas. El sabor de cada platillo que venden es exquisito, con sabores que sorprenden y te dejan con ganas de más. El ambiente es muy acogedor, no es un restaurante grande pero sin duda tiene mucho que ofrecer. Quiero volver mil veces más y probar todo lo que ofrecen.