Volví a esta sucursal porque eramos un grupo de 4 y queríamos botanear previo a un evento. Finalmente probé los mini nachos charros - tan sabrosos como se ven - También probé las quesadillas de pollo, estaban bien. Lo que no me está encantando es la atención de ciert@s meser@s del lugar. La primera, no tenía idea de donde estaba parada. La segunda, fue confianzuda y sin ánimos de atender o sugerir nada. Luego otro avisa en la terraza que se apagaran los cigarrillos cuando previamente ya habíamos ido y se nos había dicho que se podía fumar. Sugiero reúnan a todos los meseros y unifiquen criterios, aprendan de los platos y algo de modales. Estoy dudando de volver a esta sucursal por estas unidades.

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