El restaurante es pequeño, limpio y está ubicado en un local con bastante estacionamiento. El personal es muy amable, servicial y atento. Son muy paciente para explicar cada platillo con una sonrisa. Las porciones son buenas y muy bien presentado. No me gustó fue el sabor, ni la textura de la comida. El arroz estaba medio cocido e insipido. Lomito salteado estaba duro y la salsa bastante simple. Pescado a lo macho era filete de tilapia apanada con una salsa de tomate picante con marisco sobrecocido. No tenia sabor, ni color a aji panka. La comida estaba bastante fresca, excepto por el arroz.

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