Fui por primera vez y sobrepasó mis expectativas. Es un pedacito de Grecia en Panamá. Ambiente muy acogedor con bonita decoración y buen servicio. Siempre atentos y nos brindaron asesorías y buenas sugerencias. La comida y el vino estuvieron muy bien. Volveré sin duda nuevamente para probar otros platos y alguna cerveza griega. Los precios están dentro del rango de este tipo de restaurante, no es barato, pero tampoco es muy caro.