La comida estuvo exquisita, lo que escogimos da credibilidad a eso de que en la sencillez está la magia. Nos pedimos una pizza margarita que puedes combinar con un exquisito pesto, que a mi en lo personal me encantó. La hamburguesa también estaba rica, no soy de hamburguesas pero está gustó. Esto lo acompañamos con unos coctelitos. Si te gusta el mezcal, elige el Mandarita. Si te gustan los tragos dulces como a mi, el Frosé está riquísimo. El coctelito nos los sugirió Franklin ya que estábamos un poco indecisos. Excelente la atención que nos ofreció, muy atento, pulcro, y servicial. Por último, probamos el tres leches, al cual le ponen pistacho, lo máximo. 😍 El lugar esta hermoso, el jardín muy ameno. El único detalle es que molestaron un poco los mosquitos en el jardín.