La comida esta buena pero la atención es terrible. Éramos la única mesa y al parecer las señoras que atienden no estaban de buen humor. Demoraron en acercarse a la mesa para atendernos a pesar que nos vieron allí sentados más de 15 minutos esperando y hubo que llamarlas, siempre con mala cara y sin querer explicar los platillos. En fin la comida tiene buen sabor pero hay miles de restaurantes mexicanos en Panamá con buen menú y mejor atención.