Menú no muy variado ni en comidas ni en bebidas, pedimos unos chorizos con patacones de entrada, estaban buenos pero era muy poco; por otra parte el brisket está bueno, pero lo pedimos con unas papas que parecían las tenían en la refri y las calentaron mal en el micro, espantosas la verdad. La comida en general nos pareció bastante mala para el precio. En cuanto a las bebidas, pedimos unas de promoción de 2X1, pero nunca llegó la segunda, por mucho que se lo recordamos varias veces al chico que atendía (no diré el nombre para no perjudicarlo), de igual forma no estaba nada buena la bebida, pero nunca estuvieron de atentos a lo que les pedíamos; no sé si la estrategia es decir que es 2X1, pero olvidar a propósito traer la segunda bebida... La verdad parece todo muy improvisado, pues pasaron dos veces con platos en mano preguntando si habíamos pedido eso nosotros, lo que evidencia desorganización. Otro aspecto muy importante para nosotros fue que, es un área abierta y ellos permiten fumar en todo el espacio (contrario a lo que dice la ley), así que por mucho que esté abierto, si tienes a alguien en la mesa de al lado fumando (como fue nuestro caso), te toca aguantar todo el humo pues no hay manera de evitarlo, igual con las hookahs que venden... la verdad, de haber sabido que así era la cosa, no habría ido. Por nuestra parte no volveremos más, pues no es un lugar bonito, ni cómodo, además la atención es bastante descuidada y tanto la comida y bebidas son de regular a malo... y menos volveremos por el tema de que permiten fumar sin control. Si lo tuyo es un lugar tipo disco abierta con vista a la bahía, y fumar mientras ponen música, ese es el lugar indicado, para los que queremos conversas y disfrutar una buena atención, comidas y bebidas, sin tanto alboroto... no es recomendado