El el antiguo Hotel Hilton. no hay mucho estacionamiento. El servicio en este restaurante es un desorden y un desastre. El personal es muy pero muy lento para todas las funciones excepto para cobrar, obviamente. Tardan para limpiar una mesa y desocuparla para los siguientes clientes. Tardan en tomarte la orden. Tardan aún más en traer la comida, cuando se acuerdan o ya vas por la tercera vez que preguntas por tu comida. Pedimos su promoción dominical de All you can eat Pancakes y tardaron más de un hora en traerlas y además, bien frías. El resto del pedido llegó 20 minutos (papas fritas) y 30 minutos después (los huevos revueltos). Pedimos el refill de los pancakes y tardaron otros 30 minutos en llegar y solo 2 stacks de pancakes a la vez. No se aprovechó la promoción por falta de tiempo y además, nos cobraron como si los hubiéramos consumido como tal. El personal estaba desordenado all over the place y no tenía la disposición ni la actitud para atender a los clientes, pareciera que nos ignoraban pero había varias mesas en la situación ya que se le olvidaba que la mesa está desatendida por mucho tiempo. Fuimos para celebrar un cumpleaños y no pudimos disfrutar nada. Fue una pésima experiencia. No recomendaría a Nadia ni volvería a comer allí.