hace tiempo quería ir a este restaurante ya que cuando pasaba en las noches siempre lo veía lleno. La verdad un poco desilusionado. Pedimos una parrilla y no estaba mal pero he comido mejores. Lo que sí no recomiendo para nada es la jarra de sangría. Más bien me dieron una jarra de agua. Cero sabor, totalmente aguada. En fin, conocí el lugar pero no volveré.