Probé la pizza de prosciutto y rucola, buena presentación, le faltaba salsa, masa un poco gruesa, no estuvo mal pero no repetiria. La comida demoro demaciado en estar lista, el servicio muy malo por la mesera (le pedí un plato adicional que nunca llegó, al pedir agua te envían a buscarla autoservicio) y el barista de café no sabe de servicio, el tema del agua no termina allí, no hay vasos, son de papel (conos), al pedirle vasos al barista qué es el que esta cerca se niega y te sugiere hablar con el supervisor... Como uno quisiera perder más el tiempo en tanta ridiculez. Pesima experiencia para pasar el rato en el local.